viernes, 18 de julio de 2008

La crisis no toca a sus señorías locales: Casca, el austero


La imagen es de las películas en blanco y negro. Al estilo Landa mezclado con Saza, un poquito de Ozores y el habla estridente de Gracita Morales.

Es como una Escopeta Nacional donde el alcalde, Cascallana, su señoría de la Cámara Alta, es el 'Señorito'. Como si fuera un Fernando Martín con su empresa de más de 300 millones aportados por el sudor de los vecinos, el alcalde de los proyectos faraónicos comprará ordenadores para los ediles.

A un precio de crisis, como no: 120.000 euros. Lo dice hoy El Cascallazo. Una manera de airear ese tufo a cerrado, podrido, alcanfor que se gasta El Fary de la Plaza de España.

Argumentan los socialistas que es para que en vacaciones los ediles puedan tener informada a la población desde la montaña o la playa, o el mar, o el aire... o desde la Alianza de Civilizaciones o a partir de una miembra de la política, o para anunciarnos que en septiembre, el Alcorcón de fútbol ficha a Eto'o.

Miren señores serios que solo hablan de temas trascendentales y que encorbatados trabajan incesantemente por nuestro bienestar: los ediles no informan porque en Alcorcón quien se mueve es descabezado por el impasible Cascallana, mano de hierro del PSOE local.

Y porque en los últimos años Casca hace que el municipio parezca una película de Jaimito o una versión moderna de 'Bienvenido Mister Marshall' con el dinero de todos para que los concejales cómodamente se sienten en el chiringuito, pidan paella y sangría, y nos informen, a través del ordenador portátil, de sus preocupaciones, sus cuitas y de si el arroz está pasado o no.

¿Quieren portátiles? Comprénselos con sus dinero. Con 80.000 al año hay para cargar varias veces el carro en Media Markt. Y no hagan que los curritos, quienes les voten, sufran de vergüenza ajena por estos desvaríos, más conocidos como despilfarros.